antikapitalismoa-autogestioa-oroimena-komunismoa-herrigintza-duintasuna-formakuntza-asanblada-autodeterminazioa-parekidetasuna-borroka-elkartasuna-okupazioa-eztabaida-sozialismoa-lurralde batasuna-antinperialismoa-autonomia-iraultza-euskara-amnistía-internazionalismoa-langileria-kultura-erresistentziak.... KONTAKTUA: izartubuletina@gmail.com




2013/12/31

Carrero Blanco: La conspiración permanente-

Iñaki Egaña-GARA
Los argumentos de estas teorías conspirativas en relación a la muerte de Carrero, al margen de las del libro de Grimaldos, parecen recaer en las dudas que plantea el Sumario 142/73 de Madrid cuyas pesquisas no concluyeron en juicio (Ley de Amnistía de 1977), en el interés de la familia de Carrero de cargar las tintas en los fallos en la vigilancia y contravigilancia del almirante, en la exculpación de los mandos militares de entonces (Iniesta Cano, San Martín, Cassinello, Quintero…) y, sobre todo, en presentar a ETA como una cuadrilla de cavernícolas sin ninguna capacidad táctica y, por supuesto, estratégica.

Un programa de televisión dedicado a detectar marcianos y fantasmas añadió hace unas semanas una quinta fuente de conspiración, en línea con su carácter: EEUU se había enfadado con España, en especial con su presidente Luis Carrero, porque el almirante dirigía un proyecto ultrasecreto, el de la fabricación de la bomba atómica, a espaldas de Washington. Sólo dos potencias eran capaces entonces de hacerlo, EEUU y la URSS. ¿Significaba ello que Carrero había caído en poder de los soviets? Por tanto, ¿los americanos estaban obligados a eliminar al delfín de Franco?

No han pasado 40 años desde la muerte en atentado de ETA del presidente del Gobierno español, almirante Luis Carrero Blanco, y las teorías conspirativas han sido rescatadas por algunos medios de comunicación que, como si se tratara de una moda, difunden noticias relacionadas sobre la participación de protagonistas ajenos al hecho. La última entrega ha sido la dirigida por Miguel Bardem.

En ella, su director no hace sino seguir al pie de la letra el capítulo séptimo del libro de Alfredo Grimaldos titulado “La CIA en España”. Según Grimaldos, “es difícil encontrar a alguien que sostenga que sólo ETA estuvo implicada en la voladura de Carrero”. Esta tesis es la misma que lanzó Arias Navarro, sucesor de Carrero, a las semanas del atentado. Nada nuevo, por tanto.

El teorema de la conspiración tiene un recorrido recurrente a pesar de que pueda parecer de reciente cosecha. Un cartel de los “indignados” en Donostia lo explica a la perfección: “No a las sociedades secretas. No a los auto-atentados del 11S (Nueva York), 11M (Madrid) y 7J (Londres)”. Las sociedades se rigen, según este teorema, por grupos en la sombra que controlan todo lo que se mueve bajo el sol. Antes fueron los templarios, más tarde los masones y hoy en día la CIA. El ojo de Dios. O el del Gran Hermano. Elvis no murió en Menphis y vive de incógnito en Argentina ni tampoco Armstrong puso el pie en la luna sino en un estudio de Hollywood.

Siempre que ETA ha efectuado algún atentado fuera de lo previsible, la reacción gubernamental, para paliar las críticas hacia la falta de previsión de sus servicios secretos, ha sido la de implicar su paternidad a agentes extraños. Un rápido repaso de hemeroteca lo corroborará. ETA ha ejecutado acciones más complicadas que la de Carrero, incluso en los atentados en Madrid contra el jefe de la oposición Aznar (el coche del líder del PP estaba blindado y el de Carrero no) o contra el rey en Mallorca. En Madrid mató entre la muerte de Franco y la entrada en la OTAN a una decena de militares de graduación cercana a la del almirante y en 1988 sostuvo el probablemente mayor pulso de su historia, el secuestro del industrial Revilla durante 249 días.

En julio de 1986, ETA atacó la sede del Ministerio de Defensa, en Madrid, con 12 granadas, dos de las cuales llegaron a penetrar incluso en el interior. ABC dijo que “el centro de las Fuerzas Armadas era el mejor custodiado de España”.

Nadie habló, que yo sepa, de implicación de Washington en el atentado. En abril de 1982 ETA dinamitó la sede central de Telefónica, en Ríos Rosas, en Madrid. Casi un millón de abonados y 6.000 sucursales bancarias se vieron afectadas. ¿Estuvo Moscú detrás del ataque? Ni siquiera Interviú lo insinuó.

Los argumentos de la conspiración son fácilmente desmontables. El primero, el de la ausencia de controles tras el atentado es una falacia. Tras los hechos, Carlos Iniesta Cano, director general de la Guardia Civil, envió un telegrama a todas las comandancias territoriales que finalizaba con un inquietante mensaje: “Caso de existir choque o tener que realizar acción contra cualquier elemento subversivo o alterador del orden, deberá actuarse enérgicamente, sin restringir ni en lo más mínimo el empleo de sus armas”.

Así fue. La Policía y Guardia Civil pusieron centenares de controles en carreteras y caminos. En la madrugada del día mismo del atentado, 20 de diciembre de 1973, la Policía abrió fuego en Madrid contra un joven de 19 años, Pedro Barrios, en quien creían haber identificado a Iñaki Mujika Arregi, Ezkerra. A consecuencia de las heridas Pedro Barrios fallecería quince días más tarde. Vayan a la prensa y lean cómo “uno de los jefes militares de ETA” había resultado herido en la explosión que había provocado la muerte del Presidente español. Cuando comprobaron que Barrios no era Ezkerra, la noticia desapareció de los diarios.
En Madrid, decenas de jóvenes vascos que se encontraban realizando el servicio militar, fueron detenidos. En Baiona, Hendaia y Donibane Lohizune, la gendarmería hizo numerosas detenciones, entre ellas la del que decían era jefe militar de ETA, Juanjo Etxabe. En Donostia, la policía había matado a Josu Artetxe, militante de ETA. En la nota oficial dijo que Artetxe se había suicidado para no contar datos de la operación contra Carrero.

La implicación norteamericana se cae por su peso. Toneladas de documentación desclasificada, decenas de biografías y hagiografías, y ni una sola línea que apoye la línea conspirativa. Como se ha aireado recientemente, Kissinger se reunió con Carrero Blanco en los días anteriores al atentado. Según los conspiradores, la reunión fue un fracaso. Carrero se enfrentó a Kissinger. Tal y como hizo Franco con Hitler en Hendaia en 1940. Mala ficción. Las relaciones entre Washington y Madrid eran excelentes. Vernon Walters, entonces director adjunto de la CIA, lo cuenta en sus memorias (Silent Missions) e incluso se declara admirador de Franco.

Desde las negociaciones para el establecimiento de bases norteamericanas en suelo español, las relaciones entre Washington y Madrid no tenían secretos. Los puestos claves de la inteligencia y del Ejército español estaban en manos de hombres profundamente franquistas y a la vez americanistas. Algunos de ellos, incluso, se habían formado en EEUU. Cuando el golpe de 1981 se iba a probar cuán cerca estaba Washington de los hombres más conservadores y retrógrados del Ejército español. Los sucesores de Carrero.

Desde 1953, EEUU siempre ha apoyado en España la opción más conservadora de entre las posibles. Sin excepciones. La percepción de España como un territorio susceptible de quedar bajo control de fuerzas y sindicatos comunistas era la principal preocupación de Langley en los años 70. Cualquier ataque al régimen se consideraba apto para la desestabilización y por tanto de alto riesgo. Mientras todo el aparato de Información del régimen franquista ligaba la insurrección vasca al comunismo, EEUU ya señalaba que la estrategia de ETA, comunista, era similar a la que había teorizado el brasileño Marighela, que la acción del Estado hiciera imposible la vida a los ciudadanos: acción-represión-acción.

Esta es la misma lectura que hizo Andrés Cassinello. Como es sabido, Cassinello, fue el padre del famoso Plan Zen. A comienzos de 1960, Andrés Cassinello desplazó su residencia a EEUU. En Fort Bragg (Escuela de Guerra Especial del Ejército de USA en Carolina del Norte) se diplomó en Contrainsurgencia, primero, y en Operaciones contra-guerrillas, más tarde. Cassinello, sería el último jefe de los servicios secretos franquistas (SECED) creados por Carrero. Hombre de Washington en Madrid.

Poco después de la muerte de Carrero, Cassinello concluyó Subversión y reversión en la España actual, un grito contra el “debilitamiento progresivo” del sistema. Franquista radical. El trabajo encajaba perfectamente en los postulados de aquella Red Gladio, la red invisible promocionada por los norteamericanos, para preservar el mundo del comunismo. La extrema derecha de la derecha. Como novedad, en este manual sobre el modo de encauzar la “cruzada” anti-comunista, Cassinello dedicaba un capitulo a ETA y a sus objetivos: “No producir víctimas entre la población adicta o neutral; aparecer como las valedores ante las supuestas injusticias del Estado; lograr eco favorable en los medios de difusión internacionales y ridiculizar la acción de las Fuerzas de Orden Público, poner en evidencia sus dificultades operativas y mostrar que ETA domina el terreno cuando se lo propone”.

Con una sintonía total entre Washington y Madrid, un miedo visceral al comunismo y a todo aquello que supusiera cualquier movimiento antes de la muerte de Franco ¿deseaba la CIA la desaparición de Carrero? Mucho me temo que fue la misma agencia la que había dado el visto bueno a su nombramiento como presidente mientras “maduraba” al príncipe. No hay que olvidar que el sucesor de Carrero sería Arias Navarro. De Guatemala a guatepeor. Fascistas ambos convencidos.

Nadie recuerda, supongo que intencionadamente, que ese mismo día del 20 de diciembre comenzaba a celebrarse en el propio Madrid el Proceso 1001, contra la dirección de CCOO. Y que todas las miradas estaban puestas precisamente en el juicio contra la dirección del entonces sindicato comunista. Y que la capital hispana ofrecía una gala hipócrita frente a las numerosas delegaciones y medios europeos. Policías, espías y chivatos andaban tras los sindicalistas.

La imagen de una organización separatista vasca sin apenas capacidad de análisis estratégico y muy limitada en el aspecto operativo ha sido una constante a la que se han sumado la mayoría de los grupos antifranquistas. Algo estaban haciendo mal cuando ETA llegó a convertirse en la referencia política contra el dictador, despertando simpatías en numerosos sectores sociales. Excepto UGT y CNT, todas las formaciones históricas y nuevas, incluidas LCR y MCE, criticaron la acción de ETA.

Santiago Carrillo fue el primero en lanzar la tesis de los americanos. Carrillo sabe que trabajar para los americanos era el peor epíteto que podían lanzar a sus contrincantes, para descalificarlos. Jesús Monzón, jefe de la guerrilla pirenaica y dirigente del PCE, fue descalificado por Carrillo tras llamarlo “trabajador a sueldo del imperialismo norteamericano”. La cantinela de la época.

El mensaje de fin de año de Franco aplicó los mismos tonos que los diarios del régimen: “La violencia de una pequeña minoría, postulada desde el exterior, que a nadie y nada representa, se ahoga en la madurez del pueblo español, cuya serenidad y confianza se asientan en la seguridad de que los órganos del Estado administran justicia y aseguran el orden bajo el imperio de la ley. Las instituciones han funcionado insertadas en nuestro pueblo”.

Las noticias de la prensa española fueron pueriles. Uno de los bulos mayores fue el de la presencia de un ingeniero sueco en minas que habría preparado el túnel de Claudio Coello. Lo único cierto al respecto es que ETA había enviado a América a varios de sus militantes para aprender de los Tupamaros las técnicas de zulos y túneles.

El resto de los argumentos son obvios. Iñaki Pérez Beotegi Wilson, fue detenido y torturado brutalmente en julio de 1975 en Barcelona. Según Granados y Bardem, su declaración policial sirve para construir los detalles del atentado. En enero de este año de 2011, Xabier Beortegi, detenido en Iruñea por la Guardia Civil, dijo que, tras las torturas, “hubiera dicho que hasta maté a Manolete”. Wilson torturado afirmó que un desconocido le dio un papel en un bar indicándole el objetivo. Gracias a Operación Ogro, de Eva Forest, sabemos que declaración policial y realidad fueron bien distintas.

En Operación Ogro, Julen Agirre (Eva Forest) entrevistó a los miembros del comando que participaron en la muerte de Carrero. Sobre el origen de la información que ubicaba al almirante en la iglesia de la calle de los jesuitas de la calle Serrano, los entrevistados la esquivaron en dos ocasiones. Pero afirmaron tajantemente que la información “llegó a la dirección. Nosotros nos limitamos a comprobar lo que nos pidieron. Pero la vía no la conocemos”. Estaban protegiendo las fuentes.

Meses más tarde, la Policía detuvo en Madrid a 19 personas, a las que acusó de formar parte de la infraestructura de ETA en la capital del Estado. Entre ellos Alfonso Sastre, Lidia Falcón, Antonio Durán, Eliseo Bayo, Mari Paz Ballesteros y la propia Eva Forest, la autora del libro en el que se detallaba el atentado. La mayoría de ellos eran disidentes del PCE. Cuando ingresaron en prisión, el ministerio de Gobernación les acusó de haber identificado al objetivo y de haber participado en los preparativos del atentado que acabó con la vida del presidente del Gobierno español, compañero inseparable del dictador Franco desde los inicios de la rebelión que le llevó en 1939 al poder. La muerte de Franco en 1975 les evitó de esa condena a muerte que estaba dictada ya antes de un juicio que nunca se celebró.

2013/12/25

Mandela purificado

"Mandela inspiró a millones, dentro y fuera de Sudáfrica. Inspiró a millones de personas blancas y europeas con lo que se llamó “reconciliación”, pero lo que esto significaba para ellos era que el gobierno les permitió quedarse con sus tierras y ganancias ilícitas."
 
Nació Rolihlahla en julio de1918, en una nación donde no era realmente ciudadano, en un país llamado la Unión de Sudáfrica que formaba parte del Imperio Británico.

El mundo llegaría a conocerlo como Nelson, el nombre que le puso un maestro de primaria. Nelson Mandela.

Finalmente, después de vivir 95 años, Mandela ha regresado a sus antepasados.

Entre el nacimiento y la muerte, él abrió el camino a una vida asombrosa de amor y revolución, de lucha y resistencia, de prisión y aislamiento, de libertad y. . . tránsito.

A su deceso, los medios estadounidenses lo han pintado como un tipo de líder africano de los derechos civiles, tal vez un Martin Luther King Quinto, con halo de cabello blanco.

Un presidente emitió una declaración lamentando su “condena ilícita”.

De hecho, es peligrosamente engañoso hacer de Mandela un King o un Malcolm. No era ni el uno ni el otro.

Era simplemente él mismo: un abogado africano que utilizó cada herramienta a su disposición, legal cuando fue posible, ilegal cuando fue necesario, para resistir un sistema que aplastaba a las vidas africanas como si fueran cáscaras de cacahuate. Era un revolucionario, un guerrillero armado y comandante de un ejército guerrillero, Umkhonto we Sizwe (Lanza de la Nación) del Congreso Nacional Africano (ANC).

Después de 1948, el gobierno de Sudáfrica se volvió un instrumento de terror y tortura que sólo un pueblo paranoico como los bóers sudafricanos pudo montar. Bajo el estandarte del Partido Nacional, el gobierno erigió la odiosa barrera del apartheid (“el estar aparte” en afrikáans), la cual llevó la supremacía blanca y la subordinación negra a niveles verdaderamente demenciales y deshumanizantes.

Sudáfrica se volvió la encarnación del racismo blanco legalizado y de una descarada opresión brutal, diseñada principalmente para obtener y explotar el trabajo de los negros al precio más bajo. A cada oportunidad, este sistema sembró humillación, dolor y violencia en la vida de los Africanos. Corrompió cada faceta de la vida africana –– economía, educación, salud, empleo y familia–– para el beneficio de los blancos.

El Dr. Nelson Mandela fue encarcelado después de ser encontrado culpable de sabotaje como parte de sus actividades guerrilleras, y recibió una sentencia de cadena perpetua.

El creciente movimiento contra el apartheid y la subsecuente campaña de desinversión que obligó a las instituciones occidentales a retirar su capital invertido en el régimen apartheid, persuadió a los sectores líderes del poder blanco sudafricano a sentarse en la mesa de negociaciones y transformar su política.
Lo hicieron ––con una importante condición: Entregaron la maquinaria política del país al Congreso Nacional Africano (ANC), sí. Pero liberaron la economía del control político.

Kwame Nkrumah, el primer presidente de la Ghana postcolonial dijo una vez que “La independencia política sin independencia económica es sólo una ilusión”. La certeza del adagio de Nkrumah se demostró cuando se ganó la Independencia sudafricana: a los negros se les abrió la puerta a cargos electos, pero se les cerró la puerta a la inmensa riqueza del país al ponerla en manos privadas.

El Dr. Nelson Mandela fue contratado para consolidar esta situación, y hoy en día Sudáfrica es una de las naciones más desiguales económicamente sobre la faz de la tierra, sólo rebasada, tal vez, por Estados Unidos.

Dicho esto, lo que hizo Mandela fue dirigir a una nación conocida como una paría internacional y transformarla en una de las naciones más respetadas del mundo. Cerró la puerta de la historia a un país que, al parecer, buscaba tomar el lugar de los Nazis en el racismo y el odio.

El hijo de una familia real de una tribu africana en tierra ocupada del Imperio Británico, en una nación donde la raza y color de la piel dio a uno el derecho al privilegio u a la opresión, abrió la puerta a una nueva nación cuando salió de la prisión política para llegar a la Presidencia.

Esta es materia de una obra de gran dramatismo, de sueños hechos realidad, de pérdidas épicas, de hiriente soledad, de hacer lo correcto en el momento correcto.

Mi cuñado y diplomático estadounidense me dijo una vez que Sudáfrica era el país más hermoso que jamás había visto, pero que sus políticas y prácticas racistas lo habían convertido en uno de los más feos.

El Dr. Nelson Rolihlahla Mandela y el enorme movimiento internacional anti-apartheid ayudaron a devolver esa hermosura.

Mandela inspiró a millones, dentro y fuera de Sudáfrica. Inspiró a millones de personas blancas y europeas con lo que se llamó “reconciliación”, pero lo que esto significaba para ellos era que el gobierno les permitió quedarse con sus tierras y ganancias ilícitas.

Los africanos recibieron orgullo y dominio político; los blancos recibieron riqueza, tierras y privilegios económicos.

Una vez más, los negros pagaron el precio de la “paz social” y de un acuerdo político.

Tal vez se eliminó el apartheid, pero el privilegio, no.

Para millones de sudafricanos, la larga caminata a la libertad no termina.
Desde la nación encarcelada, soy Mumia Abu-Jamal.
--© ‘13maj
8 de diciembre de 2013
Audio grabado por Noelle Hanrahan: www.prisonradio.org
Texto circulado por Fatirah Litestar01@aol.com
Traducción Amig@s de Mumia, México

2013/12/17

¿Qué ocurre y qué está en juego en Ucrania?

"Las banderas rojinegras del ejército colaboracionista ucraniano de la segunda guerra mundial o del partido fascista Svoboda (con representación en el parlamento ucraniano) han sido muy visibles en las movilizaciones, así como su líder Oleh Tyahnybok."

Jon Kortazar Billelabeitia (*) historiador
GARA 
 
Ucrania ha saltado a las primeras páginas de los periódicos de medio mundo debido a las protestas bautizadas como «Euromaidan» (Europlaza). La imagen que la prensa convencional nos ha transmitido es la de un protesta «democrática» frente a un Gobierno «autoritario» que emplea la violencia para aplastar esas protestas; unas protestas para «acercar Ucrania a Europa» (parece que está en otro continente), contra un Gobierno «subordinado a Rusia». Por tanto, la foto está ya sacada: Ucrania debe «liberarse del patronazgo ruso» para emprender su camino en la democratización de la mano de la UE, que le ayudará en las «reformas democráticas». Por si queda alguna duda, los jóvenes en las calles de Kiev ayudan a «clarificar» la foto: jóvenes montan barricadas en la calle contra la policía, ergo debe ser una lucha justa.

Sin embargo, se impone la necesidad de una análisis sereno sobre Ucrania, si no queremos ser (de nuevo) derrotados ideológicamente. Esta «foto» mencionada, parte del desprecio o de la negación de un hecho incontestable: Ucrania es un Estado independiente y democrático. El Estado ucraniano tiene sus propias instituciones elegidas democráticamente en procesos validados por los observadores internacionales (según todos los estándares las elecciones ahí son más libres y limpias que en países alineado hacia Occidente como Georgia). La ciudadanía ucraniana ha elegido a Yanukovich como presidente y a una mayoría parlamentaria de su partido, por lo tanto Yanukovich tiene la misma legitimidad que cualquier dirigente «democrático» para tomar decisiones. Sin embargo, la prensa occidental, con abierto desprecio hacia el estado ucraniano nos hablaba de Putin y «su autocracia», al parecer celoso de la pujanza de la UE. No han debido enterarse de que Ucrania no es Rusia, pero realmente nos han escamoteado las razones esgrimidas por un gobierno electo.

Las razones del Gobierno ucraniano para no firmar el Acuerdo de Adhesión de la UE apenas han sido comentadas. Básicamente y al contrario de lo que se ha repetido, la UE no ofrecía la membresía a Ucrania, sino un tratado Asociación y Libre Comercio que ha ofrecido ya a diversos países, entre los cuales hay países no europeos como Sudáfrica o Egipto. Ese tratado establecía que Ucrania debía de facilitar el libre comercio con los países de la UE, con lo cual los productos de la UE debían tener abiertas las fronteras económicas de Ucrania. Esto significa que además de dejar a Ucrania inerte frente a una posible invasión de productos-dumping europeos, Ucrania debía de romper la armonización comercial con Rusia, con grave perjuicio para las industrias que dependen de inputs rusos o para empresas que venden en Rusia (el comercio con Rusia y Bielorrusia significa el 40% del comercio ucraniano). Y es que el mercado ucraniano con 46 millones de habitantes es muy apetecible, sobre todo para Alemania y Polonia, países que han liderado la ofensiva diplomática.

Y por si esto fuera poco, el Acuerdo de Adhesión exigía que Ucrania tomase unas duras medidas que afec- taban a las clases populares, como la subida de los precios del gas, limitación del papel del Estado en este sector (privatización), «reducción del déficit presupuestario» (recortes) y congelaciones salariales. Esto es algo a quien cualquier persona de ideas progresistas se hubiera opuesto; pero hay un sector en la «izquierda» que critica las «imposiciones de la troika» en Madrid o Atenas e incluso exige a sus Gobierno que se planten, pero ve criticable que esa decisión la tome un país soberano periférico al sistema de valores occidental. Basados en concepciones eurocentristas, «Bruselas» o la UE pasan de ser «mercados y troika» a ser «agente de la democracia».

Y respecto a la «democracia» nos topamos con el atrezzo, las manifestaciones «masivas» a favor de la UE y contrarias al Gobierno, cuya dimisión exigen. Estas manifestaciones y la supues- ta «violencia policial» empleada contra ellas han dado otra oportunidad a los políticos occidentales para entrometerse en la política ucraniana: el Ministro de Exteriores alemán, Guido Westerwelle, y la Subsecretaria de Estado de EEUU para Asuntos Europeos, Victoria Nuland, han participado en alguna movilización; Catherine Ashton se ha reunido y fotografiado con los líderes de la oposición (incluido el ultraderechista Oleh Tyahnybok), diversas cancillerías occidentales han instado el Gobierno democrático ucraniano que «escuche y/o ceda a las protestas populares» (petición dirigida desde países muy remisos a hacer caso a protestas en sus propios países), incluso una misión de la UE no solicitada por Ucrania se ha desplazado a Kiev para «estudiar las posibles violaciones de Derechos Humanos». Por tanto, estas movilizaciones se nos presentan como un complemento de la ofensiva diplomática de la UE.

Sin embargo, ¿cuál ha sido la realidad de las movilizaciones? Los manifestantes se han empleado con extrema violencia, asaltando o bloqueando edificios oficiales (como el Ayuntamiento de Kiev o el despacho de la presidencia) y atacando a la policía con gases lacrimógenos, bengalas, incluso con una excavadora. La respuesta de la policía ucraniana ha sido muy comedida: en cualquier país de la Unión Europea la policía está acostumbrada a disparar por mucho menos. De hecho, según un organismo como Amnistía Internacional (organización no sospechosa de simpatías hacia Yanukovich) ha habido más heridos entre los policías que entre los manifestantes. Pero esto no es óbice para que la «violencia policial» o el «autoritarismo del Gobierno» se hayan convertido casi en verdades en nuestros subconscientes.

¿Quiénes son estos manifestantes que tan vehementemente protestan por la caída de Yanukovich? Sobre todo provienen de dos sectores: el primero son jóvenes organizados según el esquema de las «revoluciones de colores» que tuvieron éxito en diver- sos países del Este de Europa (incluida Ucrania, donde impusieron al presidente Yuschenko en la «Revolución Naranja» de 2004). En este caso se trata de organizaciones fuertemente vinculadas a redes de ONGs de propaganda de EEUU resueltas a «ex- tender la democracia por el mundo» en sintonía con la ideología neoconservadora de supremacía del mundo occidental. Suelen ser organizaciones que basan su lucha en la «no-violencia» según el manual del teórico Gene Sharp. El mismo Sharp admite que este tipo de lucha es más eficaz y «vendible» que el tradicional golpe de Estado militar (es más atractivo ver a jóvenes agitando banderas que a militares sacando tanques a la calle), y remacha que «nuestra función es hacer abiertamente lo que la CIA hacía encubiertamente». En efecto, la misión de estas «organizaciones de colores» es pretender cambiar por medios no-convencionales el Gobierno o la política de países soberanos e incómodos a EEUU.

En el caso de estas organizaciones que protagonizaron las «revoluciones de colores», son sobre todo organizaciones sin una aparente propuesta ideológica clara; se limitan a repetir consignas mínimas: «contra la corrupción», «por la libertad y la democracia» y etc. Sin embargo, apenas vemos críticas hacia el capitalismo como modo de producción, la pobreza o el injusto reparto de la pobreza. La realidad es que el anticapitalismo (a pesar que puede ser utilizado como marketing icónico) no forma parte de estas organizaciones, que por cierto, siempre que han triunfado han establecido Gobiernos neoliberales. Como se ha comentado, en Ucrania en 2004 se dio la «Revolución Naranja» capitaneada por la organización Pora! (¡Ahora!). Este año parece que el testigo ha sido tomado por FEMEN, supuesto grupo «sextremista» conocido por sus campañas agresivas y provocativas, pero perfectamente encuadrables en una lógica occidental: sus protestas políticas se han dirigido contra Putin o Yanukovich, pero nunca contra Merkel, Hollande u Obama.

El segundo sector juvenil es la extrema derecha, envalentonada por unas protestas en cuales se apunta contra Rusia, enemigo de la extrema derecha ucraniana (que luchó contra la URSS y a favor de los nazis). Las banderas rojinegras del ejército colaboracionista ucraniano de la segunda guerra mundial o del partido fascista Svoboda (con representación en el parlamento ucraniano) han sido muy visibles en las movilizaciones, así como su líder Oleh Tyahnybok. El vandalismo contra la estatua de Lenin es una prueba del gran papel que ha tenido Svoboda en el Euromaidan.

Hoy, en Ucrania está en juego la soberanía nacional económica o el colonialismo mercantil con una supremacía ideológica de la ultraderecha. Nosotros ya hemos elegido.

*Firman también: Asier Blas; Axier Lopez; Beatriz Esteban; Ibai Trebiño; Joseba Agudo; Marikarmen Albizu; Nerea Garro; Ruben Sánchez Bakaikoa y Xabier De Miguel (militantes internacionalistas).

2013/12/13

Entrevista a Ibai Trebiño miembro de Ivo Andric Kultur Elkartea, sobre actualidad y pasado de los territorios que conformaban la Republica Socialista de Yugoslavia

"El marxismo revolucionario en un acto de antiimperialismo coherente debe apoyar sin fisuras la soberanía nacional y los gobiernos legítimos que la ejercen frente al golpismo made in CIA."

Boltxe.info

Ibai Trebiño es una de las personas que mejor conoce los conflictos que se dieron en la ex Yugoslavia, que como recordaremos, explosionó en los 90, dando lugar a varias guerras cuyas imágenes aun nos estremecen al recordarlas.

Yugoslavia fue un estado socialista la cual el socialismo no llegó exportado sino que los y las comunistas tomaron el poder tras una valerosa y heroica guerra de liberación, liderada por Tito y que logró expulsar de su territorio a los nazis y construir una experiencia socialista propia. Pero mejor que sea Ibai quien nos hable de estas cuestiones y de las guerras de los 90.

B- Ibai, no cabe duda que la experiencia socialista yugoslava, fue original y propia, es decir el socialismo no era calco de otros…algunos marxistas eso lo critican, porque afirman que el alejamiento de la entonces URSS favoreció objetivamente al imperialismo ¿Qué lecturas nos haces de estas opiniones?
I- Bueno esta es una cuestión absolutamente complicada. Tito rompe con la Unión Soviética en 1948 y desde entonces se le considera un traidor desde algunos paises del pacto de Varsovia involucrándole incluso en el plan Marshall. No voy a entrar a valorar dicha ruptura, pero si diré que cualquier división entre socialistas favorece al imperialismo y se puede o se debe interpretar así.

Desde mi posición de gran simpatía hacia la URSS y como yugoslavista convencido siento profundamente que se produjese esta ruptura, no sólo porque debilitó al socialismo sino porque además tambien afectó, por ejemplo, a la relación entre Albania y Yugoslavia o Bulgaria y Yugoslavia, lo que impidió que estas repúblicas fueran integradas en el proyecto yugoslavo -aunque los albaneses no sean eslavos, si en cambio los búlgaros- y creó una cierta tensión en la zona que hoy día afecta directamente a cuestiones como la kosovar.
A pesar de no ser un marxista-leninista de la vieja escuela como lo fue Enver Hoxha (quien también liberó Albania del yugo fascista italiano mediante la lucha guerrillera) Tito fue impulsor del movimiento de paises no-alineados y tejió grandes relaciones de amistad con otros pueblos como la Jamahiriya Libia, la Egipto de Nasser o la Siria de Hafez Al Assad, haciendo objetivamente una gran aportación al antiimperialismo mundial.

B- En Yugoslavia convivían 6 repúblicas y multitud de comunidades y religiones..¿Piensas que el socialismo yugoslavo solucionó la cuestión nacional en unos parámetros razonables?
I-Si, absolutamente. De hecho creo que fue uno de los mayores logros del socialismo yugoslavo y con el cual más identificado se siente, aunque pueda parecer extraño, un abertzale como yo.

Tenemos que pensar que los balcanes han sido lugar de paso para muchas civilizaciones, una zona en continuo conflicto que ha sufrido invasiones imperiales durante siglos. De ello se deriva una composición étnica muy particular y especial, y donde una república federal yugoslava daba solución, en parte, a esa complicada cuestión nacional. De hecho, fue en 1918 cuando los eslavos del sur consiguen el primer estado independiente y soberano de la historia tras expulsar definitivamente a los imperios otomanos y austrohúngaros que durante siglos había masacrado y saqueado a los pueblos eslavos del sur de Europa. Es en 1943, bajo el socialismo y tras expulsar a los nazis, cuando la soberanía e independencia nacional de los eslavos católicos, musulmanes y ortodoxos adquiere su mayor explendor, abordando además, la problemática de otras nacionalidades no-eslavas en el territorio (italianos, albaneses, húngaros, etc) y dando un estatuto de absoluta igualdad a todas las etnias y religiones independientemente de la república yugoslavas de origen.

Además por primera vez en la historia del territorio el adquiere una independencia politico-económica total.

B-Esta claro que el imperialismo durante los años de Tito y después instigó odios entre las republicas ¿No piensas que el gobierno de Yugoslavia estuvo poco atento a estos hechos?
I-En primer lugar debemos entender que luna manera eficaz de someter a un pais de semejantes características fue mediante el divisionismo y la sectarización (claro ejemplo de ello es la Siria de hoy en día) y el endeudamiento forzoso con el FMI. Todos estos elementos crean un cócktel de inestabilidad “made in USA”. Los imperialismos norteamericano y alemán armaron e instigaron una de las guerras más criminales del siglo pasado. Tambien debemos tener en cuenta la traición de algunos dirigentes políticos del Partido Comunista Yugoslavo como Franjo Tudjman y las diferentes disidencias internas que desde dentro del partido contribuyeron al colapso de Yugoslavia. Lo que me resulta indudable es que sin injerencia extranjera hubiera sido imposible dividir el pais.

B-Cuando Croacia y Eslovenia se separan ¿Piensas que existía una reclamación de independencia real en las masas o fue instigado por el imperialismo para destruir Yugoslavia?
I-Te respondo con otra pregunta, ¿Existia una demanda real de la población para el desmantelamiento de la URSS o fue una traición dirigida por los burócratas del PCUS? ¿Hubo algún referéndum donde se diera a elegir entre socialismo y capitalismo a los paises del este de europa?

La muerte de Josip Broz “Tito” (Croata de nacimiento) crea un clima de desconfianza entre las diferentes etnias y naciones que formaban Yugoslavia, que más tarde es aprovechado por los intereses extranjeros para crear el caldo de cultivo perfecto para poder desmembrar el pais.

Es innegable que en todos los paises del mundo existe disidencia política, pero no creo que existieran condiciones objetivas (misería, pobreza, etc) ni una demanda popular real para que se desarrollase un proceso sececionista. No fueron los croatas y los eslovenos quienes eligieron ser dependientes a Alemania, sino las élites económicas. Hoy dia la hegemonía política (y las imposiciones de ella derivadas) sigue estando en manos del nacionalismo “democrático” neo-ustacha, a pesar de que la gran mayoría de la población es contraria a la adhesión a la UE y añora abiertamente Yugoslavia (según las encuestas).

B-Desde los más-media siempre se ha tenido a Serbia como la gran culpable de las guerras balcánicas, pero quizás nos puedas rebatir esa tesis….
I-Serbia (junto a Montenegro) se llevó la peor parte por negarse a firmar el acuerdo de disolución de Yugoslavia. Es a raíz de su negativa a disolver la República lo que genera la demonización, sobretodo mediática, de los serbios. Para hacernos una idea, las grandes limpiezas étnicas en los balcanes son atribuidas a los serbios (Srebrenica en Bosnia o Racak en Kosovo) pasando por alto y legitimando incluso los crimenes de guerra croatas, albaneses o bosniacos instigados por occidente. Solo hace falta ver cuantos Serbios han sido juzgados y condenados en el Tribunal de La Haya y cuantos croatas o Albaneses.

No voy a negar que las tropas serbias (en referencia de las milicias serbias no al JNA -Ejercito Nacional Yugoslavo-) cometieran excesos, pero tambien otras etnias cometieron excesos y limpiezas étnicas que no solo no han sido juzgadas sino que además han sido aplaudidas por los políticos occidentales y silenciadas y/o manipuladas por los medios de comunicación occidentales (ej: operación tormenta, limpieza étnica contra los serbios del enclave croata de Krajina). Años despues hemos sabido que el bombardeo del mercado de Sarajevo (que motivó la participación de la ONU en el conflicto bosnio) no fue obra de los serbios, la masacre de Racak (pretexto utilizado por la OTAN para invadir Kosovo) fue farseada como lo es hoy día la supuesta masacre de Ghouta en Siria. Por suerte actualmente contamos con medios suficientes, redes sociales y otros sitios donde la información se maneja al instante.

Otro de los factores claves para comprobar el “odio antiserbio” es el lenguaje mediático hegemonista que utilizan los mass-media y cuyo único objetivo es difundir la idea y señalar a Serbia como único culpable y responsable de la guerra (lo que en Euskal Herria conocemos como vencedores y vencidos).

Belgrado bajo los bombardeos de la OTAN

B-El colofón fue la guerra de Kosovo y los bombardeos contra Belgrado, vayamos por parte ¿Qué piensas acerca de Kosovo, sobre si es parte de Serbia o por el contrario parte de Albania y como valoras la imposición imperialista de crear ese estado títere y pro-yanquee?
I- El año pasado tuve la suerte de visitar Kosovo y conocer un poco in-situ la situación. En primer lugar debo decir que el principal banco del Kosovo “independiente” es un banco austriaco y eso llama bastante la atención. Una de las primeras cosas que hizo occidente al invadir Kosovo fue robar y saquear la industria nacional para luego privatizarla. Esto para daros una idea de cual ha sido la principal motivación para la fuerzas occidentales para seguir manteniendo bajo ocupación este maravilloso territorio. A los nortemericanos de la base de Camp-bondsteel les importa bien poco los propios albaneses de Kosovo. En Kosovo no existe un proceso de autodeterminación ni de independencia, sino por lo contrario un proceso de saqueo colonial y sometimiento.

Respondiendo a la cuestión de si Kosovo es Serbia o Albania, en primer lugar debo decir que Kosovo no es una nación y quisiera desmontar esta absurda teoría y matizar que tanto Albania como Serbia son naciones con estado propio. No vale por tanto la teoria basado en “los derechos de la nación kosovar” de la que tanto han alardeado los humanistas OTANistas, simplemente porque la nación kosovar no existe.

Otra cosa a matizar es que Serbia no ha sido una fuerza invasora en Kosovo, es decir, el esquema ocupado-ocupante que manejamos con otras cuestiones nacionales (la vasca o la irlandesa por ejemplo) no es válido para este caso porque Kosovo es un territorio multiétnico actualmente ocupado por la OTAN, e historicamente sometido a la invasión de los sucesivos imperios y cuya única independencia ha sido bajo la Yugoslavia de Tito. Podriamos, si acaso, calificar a Kosovo como un territorio en disputa entre Serbia y Albania (cada uno exgrime sus razones históricas), porque así lo fue durante la época yugoslava, pero tampoco sería muy exacto ya que excluiriamos al resto de etnias que historicamente han habitado Kosovo (gitanos, turcos, goranis, judios, etc) y que son igualmente legítimos pobladores de Kosovo.

Todas la etnias no-albanesas han sido desposeidas de sus derechos nacionales y civiles en el actual Kosovo, donde han pasado de ser ciudadanos de pleno derecho a ser ciudadanos de segunda en su propio pais. Para entender porque la mayoria de la población era etnicamente albanesa a finales del siglo XX, debemos atender a algunas circustancias demográficas y sociales como la emigración de la población serbia, o una elevada tasa de natalidad entre la comunidad Albanesa. Estos factores beneficiaron a los albaneses (Esto sin contar los planes expansionistas del nacionalismo albanés) rompiendo el equilibrio étnico existente y convirtiéndoles en mayoria con más de la mitad de la población. . Todo esto sucedió antes de la guerra de 1999.

Hoy en día los albaneses representan el 96% de la población kosovar, lo que demuestra que las fuerzas paramilitares nacionalistas albanesas han cometido una grave limpieza etnica en el territorio. Los serbios ahora sólo representan un 3% de la población y viven marginados por las instituciones de Pristina. Tambien los Goranis (eslavos musulmanes que habitan en las montañas) han denunciado un proceso de asimilación contra ellos, la imposición de la lengua albanesa contra su voluntad y la persecución a la que son sometidos por razones étnicas o culturales. No sólo ellos, tambien los propios albaneses (por motivos políticos o religiosos) han sido victimas del expansionismo y la imposición albanesa (a través de los fanáticos fascistas pro-occidentales del UCK). En Kosovo casi todas la expresiones culturas o religiosas no-albanesas han sido eliminadas.

Si abordamos la cuestión desde un punto de vista cultural, Kosovo representa para los serbios la cuna de su nación y su cultura. Podiamos definirla para lector vasco como la “nafarroa de los serbios”. Kosovo-Polje (cerca de Pristina) es para los serbios su particular orreaga o stalingrado, donde en 1389, tras una dura batalla contra el imperio otomano (que a la postre supuso el principio de la dominación otomana en los balcanes) los serbios, con menos efectivos y armas, y con el principe Lazar a la cabeza, cayeron derrotados tras una heroica resistencia. Esta legendaria batalla, junto a otras razones históricas y religiosas, hace que Kosovo sea para los serbios la cuna de su identidad nacional. Dicho esto, la invasión por parte de la OTAN de Kosovo representa para los serbios una humillación histórica sin precedentes.

En mi humilde opinión y asumiendo que Kosovo es un territorio multiétnico, la cuestión se tiene que abordar desde un punto de vista político, es decir, es necesario (tal y como exigimos para Euskal Herria) reconocer el derecho de Serbia a existir como nación -multiétnica-, su derecho a la soberanía e independencia nacional y que su territorialidad sea respetada. La invasión de Kosovo supuso una flagrante violación de la ley internacional. Ahí esta la clave del conflicto y es el principal motivo por el que creo que Kosovo pertenece al pueblo serbio y no a la OTAN.

B- ¿Qué lectura haces de la persona de Milosevic que todo apunta a que fue asesinado en prisión por el imperialismo? Obviamente no era comunista, dicho por el mismo….

I-No se trata de que Milosevic sea comunista o no para denunciar que haya sido asesinado por un tribunal criminal. Milosevic no era comunista, pero tampoco un nacionalista radical como vendió la prensa. La familia Milosevic era una familia comunista de origen humilde y “Slobo” fue puesto en el punto de mira del imperialismo por su negativa a disolver la Yugoslavia socialista.

Ahí la explicación a semejante campaña anti Milosevic: dicen que su discurso en Kosovo Polje fue el detonador étnico en kosovo, pero si se analiza bien ese discurso uno se da cuenta que en ningún momento hace alusiones de índole nacionalista, asi que partiendo de esta base creo que Milosevic es un “mártir” más del imperialismo. Milosevic seguramente tuviera fallos como todo ser viviente, pero tuvo que lidiar con decisiones difíciles, en primer lugar porque decidió suspender la autonomía de la república serbia de Kosovo que otorgaba plenos derechos a los albaneses de Kosovo, pero debemos entender en que situación se encontraba Yugoslavia para entender este tipo de decisiones.

Serbia y Montenegro fueron victimas de bombardeos criminales por parte de la OTAN, su economia resultó dañada por un embargo criminal, el presidente montenegrino Djukanovic le abandonó a su suerte en plenos bombardeos de la OTAN, la comunidad internacional le obligó a firmar tratados de paz (donde la república que presidía salía perdiendo) y que ni tan siquiera se han cumplido (perjudicando a los serbios) y por si esto fuera poco, la CIA a través del movimiento fascista OTPOR montó una “revolución” (de las que hoy en día estan montando en Ucrania) para desalojarle del poder en detrimento de fuerzas pro europeas y dar así vía libre al saqueo económico. La política económica de la serbia de Milosevic fue más progresista que cualquier pais “democrático” de Europa, como lo es hoy día la política de Yanukovich en Ucrania o Lukashenko en bielorrusia.

El marxismo revolucionario en un acto de antiimperialismo coherente debe apoyar sin fisuras la soberanía nacional y los gobiernos legítimos que la ejercen frente al golpismo made in CIA.

El final de Milosevic todos lo conocemos: fallece repentinamente mientras un tribunal de criminales al servicio de la OTAN le juzgaba por crímenes contra la humanidad. Por desgracia gran parte de la izquierda sigue en silencio frente a las farsas judiciales de un tribunal de excepción como es el Tribunal Pena Internacional de La Haya. Lo hemos visto tambien en Irak o Libia.


B-Sabemos que formas parte de una asociación que toma parte de este tipo de cuestiones, háblanos un poco de ella
I-Efectivamente estoy trabajando junto a otra gente en una asociación cultural llamada Ivo Andric, en homenaje al escritor yugoslavo, premio nobel de literatura en 1961.

Tenemos la idea de presentar la asociación muy pronto y de momento estamos trabajando en tema de comunicación, traducciones de documentales (“the weight of chains” de Boris Malagurski) o incluso hemos hecho una aportación económica para una pelicula del mismo Boris. En principio nuestra intención es difundir la cultura balcánica y yugoslava en Euskal Herria, es decir un trabajo única y exclusivamente cultural. Politicamente somos partidarios de la unión de los eslavos del Sur en forma de estado.

De todas formas podeis seguir nuestras actividades y conocer mejor la asociación a través de las redes sociales y de nuestro blog (http://ivoandricelkartea.wordpress.com/)

B- Para acabar si que te quisiéramos pedir que 20 años después de todo lo ocurrido nos digas, tu que conoces esa parte de Europa, cual es la realidad de allí, hoy día
I-De todos mis viajes a la ex-yugoslavia he vuelto con una sensación muy positiva en el plano emocional (los balcánicos son gente espectacular, amables y hospitalarios) y algo negativa y escéptica en el plano político, derivado de la situación actual.

En primer lugar porque la OTAN sigue presente y Alemania sigue saqueando sin piedad a los pueblos balcánicos. En segundo lugar porque las problemáticas de los serbios en Croacia, Kosovo o Bosnia siguen sin solucionarse debido a que los serbios son ciudadanos de segunda en terroritorios que llevan habitando desde hace siglos. Creo que cada etnia necesita un estatus de igualdad civil y nacional real y práctica en cada territorio que habitan y eso sólo existia bajo la República Socialista Federal de Yugoslavia. Hablas con la gente y te das cuenta lo querido que fue Tito y sus políticas sociales y nacionales. En Bosnia o Macedonia Tito sigue siendo un auténtico “ídolo de masas”.

Mi conclusión es que la unión de los eslavos del sur es más necesaria que nunca, desde un punto de vista étnico, cultural, político y social. Además la historia demuestra que el único periodo de independencia nacional del territorio fue bajo esa unidad. Los periodos anteriores y posteriores a Yugoslavia han sido y son parte de la historia de saqueo, dominación, asesinato y sometimiendo hacia los pueblos balcánicos.
Creo que la defensa de la unidad de Yugoslavia como estado multiétnico va ligado dialécticamente al concepto de derecho de autodeterminación de los pueblos y es bajo la falsa bandera del divisionismo y la secesión lo que es realmente antagónico a la independencia. Es un concepto que en Euskal Herria es difícil de entender, debido en parte al desconocimiento y tambien a la manipulación y a la simplificación política del conflicto que hacemos,. Cualquier paralelismo entre Euskal Herria y la ex-yugoslavia es un planteamiento erroneo .

El derecho de autodeterminación es un término muy amplio que puede implicar una unidad territorial entre diferentes naciones (por lo menos en el caso balcánico) no sólo se trata del hecho de tener una bandera y una moneda común europea.

Pues nada más…eskerrik asko por tus aclaraciones y un gusto haber charlado con tigo acerca de estos temas que tantas pasiones y debates crearon en la década de los 90

2013/12/12

Entrevista con Nekane Jurado

"Hoy la gente para vivir solamente tiene su capital humano, lo que antes se llamaba fuerza de trabajo. Si no te lo compra nadie, no tienes nada y encima lo tienes que ofertar en un mercado en el que tú no pones el precio, lo pone el sistema."

Diario.es

En el seminario organizado por Gaindegia, Observatorio para el desarrollo socio-económico de Euskal Herria y celebrado en Vitoria ha participado la economista, psicóloga clínica y miembro del movimiento Elkartzen Nekane Jurado.

En su conferencia sobre los resultados de su trabajo "El reparto de la riqueza y la exclusión social en Hego Euskal Herria" exponía que las causas de la exclusión no aparecen por azar ni son coyunturales: son claramente estructurales. "Es el resultado de una determinada estructura social, política, cultural y económica. La propia organización social, directa o indirectamente, es la que genera 'poblaciones sobrantes". Por todo ello esta experta plantea que el análisis de la desigualdad debería ir más allá de análisis estadísticos de distribución de rentas y riquezas y añadir el análisis de la distribución del poder.

Usted habla de que el capitalismo es sobre todo polarización, concentración de riqueza. ¿Es imparable esta tendencia?
Respuesta. Es muy difícil. Los datos están ahí. El 50% de la población mundial solo posee el 2% de la riqueza del planeta y el 43% de la riqueza está en manos del 1% de la población. Esto levanta ampollas pero añadir que ésta se ha incrementado a pesar de las crisis lleva a replantearse los dogmas del modelo económico imperante. Aquí en Euskadi, por ejemplo, estamos acercándonos a un tercio de la población en riesgo de exclusión social y eso está provocado por la concentración de rentas que se genera a través del juego del mercado laboral. Cada vez hay menos gente trabajando o más gente en desempleo y cada vez hay más gente que agota las prestaciones, más familias que no tienen ningún tipo de ingreso y, a su vez, los que están trabajando tienen más reducido por decreto su salario. A eso le tendremos que sumar que cuando se rompan los convenios de aquí para aplicarse el convenio estatal se impondrán nuevas bajadas muy fuertes para los trabajadores de Euskadi. Es resultado de todo esto es la concentración de la renta en menos manos y la polarización.

P. Se ha referido, al hablar de las personas desempleadas, a las "poblaciones sobrantes" que genera el sistema. ¿Son inevitables?
R. Estas poblaciones sobrantes se han dado siempre, en todos los modelos económicos. Son los llamados nichos ecológicos que se iban reequilibrando con guerras, hambrunas o epidemias. Ahora también se dan. El sistema de producción necesita cada vez menos mano de obra porque funciona con la robótica. Al final se genera todo un exceso de mano de obra sobrante. Los Estados la tienen de reserva. No había problemas graves cuando disfrutábamos de unas leyes que protegían mucho el mercado laboral, que fueron todas las del Estado de bienestar y también cuidaban del mercado de trabajo. Era difícil echar a los trabajadores, y entonces se esforzaban más en redistribuir el trabajo. Ahora se da carta blanca a que puedas prescindir de los empleados, esto provoca una caída en masa de todo lo que sobra.

P. ¿Qué nos depara el futuro de seguir así?
R. Es muy negro, pero no porque yo tenga una bola de cristal y lo diga. Pongo un ejemplo: si alguien sabe leer un mapa y pone rumbo a Madrid, llegará pese a las desviaciones y demás. Llegará a ese destino antes o después. En economía pasa parecido. Las líneas están marcadas y sabes dónde te lleva activar una línea económica. Tal como estamos funcionando, con más precariedad constante, con más desprotección social, nos lleva a poblaciones cada vez más pauperizadas, más tensión social.

"Las líneas están marcadas y sabes dónde te lleva activar una línea económica. Tal como estamos funcionando, con más precariedad constante, con más desprotección social, nos lleva a poblaciones cada vez más pauperizadas, más tensión social."

P. También hacia hincapié en los instrumentos de medición utilizados y como éstos distorsionan, en su opinión, la realidad.
R. Sí, nos la dan suavizada, pasada por el photoshop. Utilizan medias y con ellas lo que se hace es sumar los extremos mientras las desigualdades no se contemplan, quedan fuera. Hay artilugios estadísticos para acabar montanto el informe que quiere y necesita el gobernante para suavizar las duras políticas que ponen en práctica.

P. En términos económicos, usted habla de desarrollo humano y no de desarrollo a secas. ¿Cómo se debe entender esto?
R. Cuando se habla de desarrollo sostenible, que queda tan bonito, hasta Iberdrola con su energía verde, no se tienen en cuenta a las personas. No puede haber desarrollo sin sustentabilidad social, no solo se trata de que sean sustentables las materias primas, el medioambiente, nos olvidamos de las personas que estamos en la tierra. Es un todo transversal. No puede haber desarrollo si no hay un equilibrio socioeconómico, es pura lógica.

P. ¿Qué hace para intentar evitar esas tan negativas consecuencia a las que el sistema, según usted, nos aboca?
R. Lo primero que debemos hacer es preguntarnos por qué se está produciendo la concentración. Hoy la gente para vivir solamente tiene su capital humano, lo que antes se llamaba fuerza de trabajo. Si no te lo compra nadie, no tienes nada y encima lo tienes que ofertar en un mercado en el que tú no pones el precio, lo pone el sistema. Mientras ese capital humano no se sitúe en un punto central, y a partir de ahí haya unas leyes que lo protejan porque está en minoría, y se den reformas laborales en la línea totalmente contraria a las actuales, no hay nada que hacer. Si no le das la vuelta a eso podrás crear cierto empleo pera será empleo para trabajadores pobres que generará trabajadores más pobres todavía. Por otro lado, la otra forma de concentración viene originada desde el sector público porque sus fórmulas de recaudación van en contra de los trabajadores, porque son impuestos al consumo. Deberían cotizar la rentas altas y los impuestos de sociedades. Que graben los beneficios que están teniendo y ese dinero que recaudan las instituciones han de destinarlo a los más excluidos, rentas de garantías de ingresos, niveles de pensiones, niveles de desempleo, que queden cubiertos a un nivel más alto. No hay otra alternativa para hacer justicia social y redistribución.

P. Pero los gobernantes aseguran que eso ya se está aplicando.
R. Sí, que esas políticas existen sí, ya lo sé. ¿Pero a cuánta población cubre?, ¿Qué cantidad de dinero se da, por debajo de qué umbral de pobreza les siguen dejando a esas personas? y ¿se cubren la necesidades?. La respuesta es no. Y se demuestra fácil. Acabo de analizar los presupuestos del 2014 del Gobierno de Ínigo Urkullu para pasarles el informe a los grupos sociales. Y dispongo del cálculo que cuánto va a la renta de garantía de ingresos, que desde el Ejecutivo venden que ha subido. Va a bajar el 7% y además, sino tienes en cuenta a todos los demandantes, va a haber un porcentaje al que no se la vas a poder dar. El porcentaje respecto al Producto Interior Bruto, no llega al 0,5 %. Y recordemos, que en los años de bonanza, solo para las ONGS de ayuda al desarrollo se pedía el 0,7%, para los países más desfavorecidos, a todos nos viene a la memoria aquellas campañas, lo digo para que los lectores tengan referencia para comparar. Ahora lo que estamos dando a nuestra población en riesgo de pobreza y exclusión social no llega al 0,7% del PIB.

P. Ha lamentado en su intervención el mal reparto de trabajo. ¿Cómo perjudica a la sociedad?
R. El reparto actual de trabajo no nos permite implicarnos en la vida. Nos está haciendo perder el conocimiento y control y esto nos limita y nos roba recursos para defendernos. Pero así somos más fáciles de gestionar para los gobiernos.

El capitalismo ha llegado muy lejos y es una economía que va contra la vida, contra la vida de la Tierra, contra la vida de las especies (…). Desde que está gestionando nuestros tiempos, nos marca hasta cuándo nos tenemos que reproducir, nos condiciona todo nuestro proyecto de vida con sus tiempos impuestos. Incluso cuando nos expulsa del mercado, que se supone que tenemos todo el tiempo del mundo para gestionarlo, nos hunde en un sentimiento de culpa. No hay más que revisar las tasas de suicidios, la primera causa de mortandad traumática por encima de accidentes de tráfico y laborales desde hace tres años en Euskadi, cuatro en España, y todo esto está muy ligado a la crisis. Pero parece que nadie hasta el momento tiene el valor de decirle al Capital hasta aquí hemos llegado y este tipo de políticas imposibilitan un desarrollo democrático de país.

2013/12/11

Proyecto, táctica y estrategia

"La coyuntura actual no es de proceso de paz. Es inexistente tal proceso a día de hoy. Un acuerdo con los estados no está al alcance y esos dos factores que se creen casi como reales, aunque cada vez menos, junto a los intereses de clase de la burguesía regionalista del PNV hace que no se implique."

Borroka Garaia da

La estrategia política es un conjunto de tácticas planificadas regidas por unos principios ideológicos de cara a conseguir unas metas. Estas metas u objetivos son llamados objetivos estratégicos cuando responden a la finalidad de un proyecto político determinado. En nuestro caso, la independencia y el socialismo serían los objetivos estratégicos históricos que se enunciarían en el Estado socialista vasco independiente como forma de superación de la opresión nacional y social.

¿Qué ocurre si los principios ideológicos varían?. Que todo ese proceso se ve modificado. Las tácticas se regirán por los nuevos principios ideológicos de una estrategia diferente y a largo o medio plazo los objetivos estratégicos por fuerza también variarán.

Y es que es muy diferente cambiar de estrategia reorganizando tácticas sin variar los principios ideológicos que hacerlo modificándolos.

Tipos de estrategia

Todos los procesos políticos suele tener cambios de estrategia, aunque lo más común son los cambios tácticos. En teoría política en el ámbito de la izquierda hay dos tipos de estrategias globales básicas. La estrategia revolucionaria y la estrategia reformista.

Una de las diferencias entre ellas reside en que la estrategia reformista tiene como techo estratégico y táctico el proceso del presente para modificarlo gradual o pragmáticamente entrando en una visión de embudo que le impide mirar más allá. Los cambios en el proceso del presente para el reformista no estarían dentro de un recorrido que haga generar las condiciones de esa ruptura radical de la estrategia revolucionaria sino que sería como subir pequeños escalones indefinidamente creyendo que de esta manera en algún momento dado se llegará a algún tipo de meta y contradiciendo por tanto a toda la historia de la clase obrera y de los pueblos. La estrategia revolucionaria no descarta reformas pero estas se ubican en un proceso de desnormalización de la coyuntura política de cara a que exploten todas las contradicciones de la realidad y haya opción de ruptura política radical.

La dura realidad


En Euskal Herria en muchas ocasiones se intenta contraponer el discurso del pragmatismo, concepto que se relaciona con seriedad, avance, eficacia y sensatez frente a lo utópico o la locura, relacionado con lo radical, dogmático, ineficaz, inmaduro y enquistador.

En Euskal Herria la clase dominante y minoritaria es la capitalista, a su vez dos estados capitalistas son los que ejercen la opresión nacional, el español y el francés. Solo mediante una ruptura radical se puede dejar atrás la opresión nacional debido al carácter y esencia de los estados que nos someten, en ningún caso democráticos, invalidando cualquier vía democrática posible hacia la liberación nacional. Esto es el ABC del conflicto que los estados mantienen con Euskal Herria y negarlo puede tener unas consecuencias desastrosas ya que puede hacer creer que los estados por convencimiento propio negociarán o un día se cuadrarán los astros en el cielo y aceptarán la voluntad de la sociedad vasca con alegría. Otro tanto se puede decir de la clase capitalista en relación a dejar sus privilegios de lado y ceder a la clase trabajadora lo que con sangre y dominación histórica han robado.

Teniendo en cuenta que el objetivo estratégico que nos interesa es el estado socialista vasco independiente, que no existen vías democráticas de superación de la opresión nacional en los estados, que la independencia y el socialismo son el antagonismo de la opresión nacional y social, que solo mediante la ruptura se quebrará la opresión nacional y que solo mediante la subordinación de la clase capitalista se alcanzará el socialismo.. echemos cuentas de que tipo de estrategia es necesaria. Obviamente una estrategia de ruptura.

Cambio de ciclo de lucha

En cuanto a los objetivos estratégicos, en estos momentos la estrategia de liberación nacional no está enfilada hacia una ruptura y la estrategia hacia el socialismo no existe. Eso no significa que no exista construcción nacional y social, que no exista lucha popular e institucional. Simplemente significa que hemos tenido un plof ideológico. Eso se traduce en que existe un hueco fruto de una debilidad importante y un vació a la hora de organizar lo estratégico. Lo táctico se ha hecho estratégico en muchos apartados.

La coyuntura actual no es de proceso de paz. Es inexistente tal proceso a día de hoy. Un acuerdo con los estados no está al alcance y esos dos factores que se creen casi como reales, aunque cada vez menos, junto a los intereses de clase de la burguesía regionalista del PNV hace que no se implique.

Es decir, no estamos en un ciclo de paz ni de resolución, y posiblemente no haya una oportunidad abierta ni la haya habido en los últimos tiempos. Y es que creer que existe una posibilidad abierta por el mero hecho de que ETA abandonara la lucha armada significa pensar que ETA era la responsable de que no existiera tal oportunidad. Los hechos hablan por si solos.

No hay nuevo tiempo abierto. Esta palabras quizás suenen duras a muchos pero creo que si no sabemos donde estamos no sabremos a donde ir.

Y es que un tiempo de soluciones sería lo adecuado, siempre lo es, pero estas no llegan por la voluntad y el convencimiento. Toda la buena voluntad choca contra los intereses irreconciliables de estados y clases
poderosas.

Por todo ello, es posible que se haga necesaria la apertura de un nuevo ciclo revolucionario con el horizonte puesto en la ruptura. Diseñando dos procesos paralelos de liberación nacional y social. Uno de forma unilateral para romper amarras con el estado mediante los hechos y acciones de una hoja de ruta detallada y otro hacia el socialismo donde hay que empezar por el diseño de la base que no está ni hecho. Todo ello también requerirá una actualización y remodelación del MLNV antes de que como forma de movimiento de liberación pase a la historia junto con el socialismo revolucionario y esta vez no por ilegalizaciones.
Seguimos pensando en claves quinta asamblearistas hechas para responder a un momento que pasó tanto nacional como internacionalmente y el enemigo nos tiene pillados en ese terreno. Los MLN y FLN nacieron en un período determinado. Ya va siendo momento de dar pasos a otras cosas que no rompan el modelo de forma, con organización revolucionaria incluida, y que además superen el modelo de partido clásico en el que avanzamos cada día más mientras que la auto-organización popular está en crisis.

Lo utópico hoy en día es creer que hay una salida sin confrontación y ruptura. Sin proceso revolucionario. Un proceso revolucionario que incluso en Catalunya tendrán que aplicar cuando choquen finalmente contra el estado si la clase trabajadora catalana logra suprimir los intentos de la burguesía regionalista por empantanarlos en la legalidad española.

2013/12/10

La verdadera historia de la lucha contra el apartheid

"...es oportuno y necesario subrayar, en medio de tanta «sentida» declaración acompañada de sus correspondientes lágrimas de cocodrilo, que hemos visto estos estos días en medios políticos «occidentales», que fueron precisamente estos mismos países, con EEUU a la cabeza, por supuesto, acompañado fielmente de sus socios europeos de entonces, más Canadá, Israel, Japón y un más que largo listado de países, los que tuvieron como leal «aliado anticomunista» a la Sudáfrica racista en un contexto de «Guerra fría»."

José Miguel Arrugaeta, historiador
GARA

Apesar de que la instauración del sistema de segregación racial en Sudáfrica, conocida como Apartheid, y la lucha en su contra, es un proceso político relativamente reciente en lo histórico, resulta bastante curioso la «amnesia selectiva» de determinados medios informativos así como de algunas elites políticas occidentales. Los olvidos, al calor de la muerte de Mandela no son por supuesto inocentes, sino parte de un ocultamiento intencionado. Detrás de tanto cinismo solo se oculta la «mala conciencia» de haber colaborado activamente con el Apartheid, o en su defecto no haber hecho nada en su contra. Actitud fácil de constatar con hechos, sucesos y documentos.

Sin irme muy atrás en el tiempo, y refiriéndome solamente al mundo, pongamos que desde 1960, es oportuno y necesario subrayar, en medio de tanta «sentida» declaración acompañada de sus correspondientes lágrimas de cocodrilo, que hemos visto estos estos días en medios políticos «occidentales», que fueron precisamente estos mismos países, con EEUU a la cabeza, por supuesto, acompañado fielmente de sus socios europeos de entonces, más Canadá, Israel, Japón y un más que largo listado de países, los que tuvieron como leal «aliado anticomunista» a la Sudáfrica racista en un contexto de «Guerra fría».
 
Nadie conoce ni puede argumentar que los países occidentales promoviesen ningún bloqueo comercial y financiero, medidas de obligado cumplimiento del Consejo de Seguridad de la ONU, propuestas «de intervenciones humanitarias», ni de nada similar. En realidad, lo que uno puede constatar es precisamente todo lo contrario: Una colaboración bastante fluida en múltiples niveles como pueden ser los comerciales, tecnológicos, financieros, inteligencia y acciones encubiertas (es decir, represión) entre otros, fundamentales para la subsistencia y reproducción de cualquier sistema. Lo más que uno puede rastrear en esas décadas infames, en que Mandela «picaba piedras» en trabajos forzados junto a sus compañeros de la dirección de ANC, son gestos menores de tipo diplomático, mediante los cuales las potencias occidentales argumentaban «regañar» a sus socios de Pretoria para convencerles de que moderasen en algo sus excesivas prácticas raciales. Posteriormente, Fidel Castro, testigo de muchas cosas, resumiría la actitud occidental de aquellos años en una sola frase, «amigos ayer del Apartheid, hoy compiten por simular amistad».

Como contraparte, cualquiera que se interese por la verdad puede encontrar con suma facilidad numerosas referencias del apoyo práctico, material y político a la resistencia antiapartheid del Congreso Nacional, dirigido por Mandela desde la prisión, por parte del Bloque Socialista y sus aliados, entre los cuales habría que destacar a las extintas URSS y República Democrática Alemana, y a Cuba con un protagonismo muy particular.

Y puestos a particularizar, el caso de Cuba resulta más que esclarecedor en medio de determinados «olvidos». Desde 1975 y hasta 1990, los EEUU (y sus socios) se hacían los locos frente a las masivas e institucionales violaciones de cualquier derecho humano en la Sudáfrica racista, pero aliada, al tiempo que apoyaban muy activamente las intervenciones «fronterizas» del ejército sudafricano. En esos mismos años un total de 350.000 cubanos y cubanas (civiles y militares) garantizaban en la práctica la independencia de Angola y enfrentaban en el terreno al ejército racista sudafricano (y sus diversos aliados locales) que imponía su idea de supremacía blanca, manu militari, en sus alargadas fronteras. Algo esencial para la supervivencia de un régimen blanco que vivía ya rodeado de países independientes, con una población básicamente negra.
A fines de la década del 80 del pasado siglo, la batalla de Cuito Cuanavale, de la cual seguramente casi nadie de ustedes ha oído hablar, rompió el corazón del sistema de defensa del Apartheid, basado en la supuesta «invencibilidad blanca». Un cuerpo militar de 40.000 hombres (angoleños y cubanos) con 500 tanques, miles de piezas de artillería y una parte sustancial de la fuerza aérea cubana destrozaron sin concesiones a las fuerzas racista y sus aliados. Las consecuencias no se hicieron esperar, los llamados acuerdos de Nueva York (firmados por Sudáfrica, Angola, Cuba, la URSS y los EEUU) garantizaron finalmente la independencia e integridad de Angola, la autodeterminación de Namibia y confinaron definitivamente al Apartheid a la propia Sudáfrica.

Desaparecido el «cinturón de seguridad», puestas las fronteras sudafricanas donde deberían haber estado tres décadas atrás (retraso siempre apoyado por EEUU y sus aliados) y acosado desde dentro por el creciente y masivo rechazo interno al régimen, para nadie era un secreto que el sistema de segregación racial tenía sus días contados, incluso para su siempre aliado EEUU, que a partir de entonces adaptó, rápida y mediáticamente, su posición pública en esa dirección, y fijaron su vista en Mandela como único interlocutor posible.

No piensen que lo que acabo de describirles brevemente es una versión personal, el mismo Nelson Mandela, durante su visita a Cuba en julio de 1991, calificó la «intervención» cubana en África como «sin páralelo en la historia», al tiempo que afirmaba que fue factor esencial del final del régimen de segregación racial en su país. Sus palabras de agradecimiento al pueblo de Cuba, en La Habana y acompañado de Fidel Castro, hablan además por sí mismas, del inmenso sentido ético y revolucionario de un Nelson Mandela a prueba de compromisos o conveniencias.

Y puestos a hablar de Mandela, o más exactamente de Madiba, que es el alias, cariñoso y cercano con el que su gente siempre lo identificó, lo primero que habría que aclarar es que fue un revolucionario a carta cabal, con el corazón a la izquierda y la sangre bien roja, por mucho que pretendan ahora disfrazarlo de Lady Di.

Y en esa dimensión de su vida, absolutamente política, los datos, argumentos y realidades hablan por sí mismos y no admiten ni doble moral ni mayores interpretaciones. Madiba fue dirigente del ANC, formando parte de una generación de dirigentes, bastante menos conocidos pero no menos importantes, que decidieron dedicar su vida a una causa justa y legítima, que fue la proyección de una nueva Sudáfrica que pudiese incluir a todos y con justicia social.

Madiba y sus compañeros se vieron obligados a ser resistentes de largo recorrido ante las actitudes y reacciones de régimen segregacionista. Y en ese mismo camino Madiba asumió y fomentó todas las formas de lucha, por eso fue también fundador de «La Lanza de la Nación», el brazo armado del ANC, cuya actividad siempre apoyó y nunca condenó, ni en las peores circunstancias y a pesar de los excesos de cualquier enfrentamiento. Y es oportuno recordar, en estos días, que hasta hace poco (incluso siendo ya presidente de su país) Mandela tenía prohibida oficialmente la entrada en EEUU pues seguía incluido en su «muy particular» listado de terroristas. Prueba fehaciente del inestimable apoyo que los Estados Unidos dieron, no a la resistencia antiapartheid, sino al régimen racista.

Más allá de su inmensa capacidad de resistencia, la entereza para defender sus principios, su dignidad personal o su enorme autoridad moral, Madiba fue un inmenso líder político y humano que supo tener una clara visión de futuro y convencer a su gente de que un proyecto de país merecía y requería de inmensa paciencia, de una capacidad política integradora, que no asumiese los valores de sus contrarios como propios. Fue capaz de perdonar sin olvidar, en aras de una paz necesaria, y se convirtió en piedra angular de diálogos y acuerdos aparentemente imposibles pero reales. Para mí fue un revolucionario realista y futurista al mismo tiempo.

La labor que se propuso sin duda tuvo resultados positivos, seguramente imperfectos pero que evitaron múltiples violencias previsibles, por eso hoy los sudafricanos, de todas las edades y colores, lloran y rinden homenaje a su Madiba, pues lo consideran el «fundador» de su joven nación, aun llena de problemas, contradicciones y dolorosas desigualdades sociales. Pero él nunca les prometió llegar a cambiar tanta injusticia, simplemente dejó todo preparado para que otros puedan continuar su lucha revolucionaria sin necesidad de violencias innecesarias.

2013/12/09

Entrevista con la madre de la presa anarquista Noelia Cotelo

"En estos centros de exterminio no existe la reinserción"

En España hay 75.000 personas presas. Noelia Cotelo es una de esas presas que el Estado mantiene encerradas. Este mes escribía un comunicado, uno más, en el que explicaba los abusos que sufre en presidio a manos de funcionarios carceleros. 

Hablamos con Lola, la madre de Noelia, que hace pocos días participó en una charla organizada por Mujeres Libres de CNT Zaragoza denunciando la situación de su hija.

D. Font 
Periódico CNT

El caso de Noelia ya comienza a ser bastante conocido por todo el movimiento libertario. ¿Cómo está tu hija? ¿En qué condiciones se encuentra?
¿Cómo puede estar una persona que la tienen completamente aislada encerrada 23 horas al día en el chabolo?

¿Sigue en régimen FIES?
Si, es un FIES camuflado. Está en el régimen 91.3 en el que las personas como mínimo pasan 21 horas al día en su celda.

En su último comunicado, Noelia se quejaba de las trabas que le ponían para contactar con el exterior. ¿Te dejan visitarla?
En Ávila llegué allí y por orden del director no me dejaron entrar, viajando desde Galicia y teniendo el bis a bis con ella. En las demás hasta ahora no he tenido problema.

En Albolote, la cárcel donde tienen encerrada actualmente a Noelia, ¿es una más de las cárceles donde se practica la tortura a las presas o la situación ahí es más dura?
Es igual, solamente que hay un médico que mira un poco más por ella.

¿Qué tipo de malos tratos ha sufrido Noelia?
Vejaciones, palizas, intento de violación, insultos, duchas en agua fría, ventanas sin cristales en invierno...

¿Qué te sugiere la palabra reinserción y que opinas de una sociedad que se dice democrática y permite la tortura?
En estos centros de exterminio no existe la reinserción. ¿Democracia? Estamos en una dictadura camuflada.

Para concluir, ¿cómo lleváis el sufrimiento los que estáis fuera?
Impotencia contra tanta injusticia que hay, ya no quedan más lágrimas. Solo 1.200 quilometros de distancia para ir y otros tantos para volver, para estar hora y media con mi hija.

2013/12/06

Fascistas de libro

"Crucifijo y religión en las escuelas, manuales para formar mujeres sumisas, reforma del aborto para castigar a las descarriadas, inmatriculaciones, chanchullos inmobiliarios y exenciones a discreción. No es de extrañar que Rouco acuda a los púlpitos en auxilio de sus hermanos de cruzada llamando a preservar la unidad de España y la Constitución, más sagradas que los evangelios."
 
Asier Vega
Alternatiba

De un tiempo a esta parte, a más de uno le viene a la cabeza el término fascista para calificar a los que manejan los hilos de este gran tinglao. Semanas después de la reprobación del uso parlamentario de tal palabra, ilustres del PP decían de la Ley Navarra de Víctimas del franquismo que era perniciosa por «establecer buenos y malos». No sorprende que ciertos grupos defiendan a los verdugos que liquidaron a 3.000 personas lejos de un frente de guerra; está claro de quién descienden, pero ¿es incorrecto afirmar que han heredado su ideario?
El fascismo, a principios de siglo, buscaba instaurar un corporativismo estatal totalitario y una economía dirigista.En estos tiempos, las corporaciones transnacionales buscan instaurar estados totalitarios para dirigir la economía hacia la maximización de su beneficio. Estado y oligarquía económico-financiera son una misma cosa; presidentes y ministros saltan del gobierno a las multinacionales y viceversa. Bien pudiera sustituirse el término ministro o consejero por el más honesto de delegado ejecutivo de tal o cual holding empresarial.

La banca paga al partido y el partido devuelve el favor multiplicado hasta 40.000 millones con cargo a los presupuestos generales. Las empresas entregan sobres, el gobierno adjudica, a cambio no se recibe ni impuestos ya que el holding de turno tiene domicilio fiscal en Delaware. Se legisla ad hoc para reabrir nucleares, se tolera la concertación de precios de los hidrocarburos, se monopoliza la energía usando como excusa la mentira del déficit tarifario y se reforma la legislación para que la patronal más ladrona de Europa ensanche sus bolsillos. Para el logro de estos objetivos, el fascismo se sirve de un nacionalismo fuertemente identitario con componentes victimistas o revanchistas que conducen a la violenciacontra los que el Estado define como enemigos por medio de un eficaz aparato de propaganda. Sirva de ejemplo el uso permanente de ciertas víctimas para forjar una identidad colectiva española negadora de cualquier otro referente nacional.

Quienes manejan los hilos del Estado agitan el espectro del terrorismo hasta el esperpento mientras saquean lo público; España está agraviada por los terroristas que se han infiltrado en los tribunales europeos y en el sistema educativo y que instiga a vascos y a catalanes a romper la patria común e indivisible.

Sin embargo, el desfalco es tan enorme que la eficacia de la propaganda es limitada. No estamos solo ante un recorte en empleo, salarios y derechos laborales, sino ante un proceso sin precedentes de liquidación de la protección social. Se arroja a buena parte de la ciudadanía al abismo de la precariedad y se les quita además la red; se depaupera la educación, se cierra el acceso a la justicia, se privatiza la sanidad… La insaciable oligarquía quiere acceder a esferas de la economía hasta ahora vetadas a su negocio. Para ello no cabe sino liquidar servicios públicos, poco importa dejar en la indigencia a millones de personas, para eso están Cáritas y la Conferencia Episcopal. Aflora así otro rasgo distintivo del fascismo meridional; el nacional catolicismo.

Crucifijo y religión en las escuelas, manuales para formar mujeres sumisas, reforma del aborto para castigar a las descarriadas, inmatriculaciones, chanchullos inmobiliarios y exenciones a discreción. No es de extrañar que Rouco acuda a los púlpitos en auxilio de sus hermanos de cruzada llamando a preservar la unidad de España y la Constitución, más sagradas que los evangelios. Concluyeron hace tiempo que el tal Jesús era un perro flauta.

Pero ni dios ni patria son suficientes para enmascarar al régimen y lo de montar un autogolpe para tirar del comodín monárquico ya no cuela. Empiezan a fallar incluso los grandes medios de comunicación que, con voces distintas, lanzan un único mensaje idiotizante y criminalizador de las protestas. Es el mensaje de sus propietarios; esos con domicilio fiscal en Delaware. Aun así, el régimen se descompone y, cuando empieza a oler a muerto, es tradición fascista tirar de pena de muerte o de sucedáneos compatibles con los tratados internacionales. Ha llegado el momento del terror penal.

Herederos de Torquemada, Gallardón y Fernández Díaz compiten elevando el ritmo y los planes de castigo. El uno propone la cadena perpetua «hasta que a mí me dé la gana» –permanente revisable dicen los entendidos– y el otro la muerte en vida. ¡Sanciones! –proclama el ministro–. Son la repanocha; hasta 30.000 euros por pancartas y actos que «ultrajen u ofendan» a España, y amagan con multas similares por insultar a un servidor armado del régimen, y hasta 600.000 euros por importunar a sus señorías frente al Congreso. El pringao al que le toque está arruinado para siete reencarnaciones. Confían en el poder paralizante del miedo y, sin embargo, desde hace más de dos siglos, se sabe que el terror penal no tiene efectos disuasorios.
Por si acaso se ensancharán las plantillas policiales, contratarán controladores y escuchas, y subvencionarán las ETTs especializadas en antidisturbios. Con camisa azul, o con cuello blanco, no se puede negar que al final van a crear empleo.

2013/12/05

Guía práctica para manifestantes bajo la nueva Ley de Seguridad Ciudadana

"Puede que durante la protesta, alguien protagonice disturbios. Entonces, el convocante podrá ser multado con un máximo de 30.000 euros –falta grave– e Interior valora que sólo se salve del castigo si condena y muestra su rechazo público a esos disturbios."


Pedro Aguèda
http://www.eldiario.es/

El anteproyecto de reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana aprobado este viernes por el Consejo de Ministros recoge un buen número de infracciones susceptibles de ser cometidas durante las formas de protesta que han inundado las calles durante la presente legislatura. 

Este cuestionario pretende ser una guía práctica acerca de las multas contenidas en el anteproyecto, al que aún resta por incorporar nuevos informes de los ministerios de Justicia y Hacienda, recomendaciones del Consejo de Estado y la Agencia de Protección de Datos y las modificaciones que introduzca el trámite parlamentario.
¿Se podrá gritar ante el Congreso “no nos representan"?
Si lo hace participando en una protesta previamente comunicada a la Delegación del Gobierno, no podrá ser sancionado. En caso contrario, incurrirá en una infracción leve, castigada con multas de entre 100 y 1.000 euros.
 
Lo mismo ocurrirá si la manifestación es en cualquier otro lugar. Si es usted el convocante, por Twitter o cualquier otro medio, también podrá ser multado con esas cantidades, aunque no aparezca por allí.

Puede que durante la protesta, alguien protagonice disturbios. Entonces, el convocante podrá ser multado con un máximo de 30.000 euros –falta grave– e Interior valora que sólo se salve del castigo si condena y muestra su rechazo público a esos disturbios.
¿Y si participa en altercados?
El Código Penal ya recoge los delitos de daños y desórdenes públicos, así como el de resistencia o atentado a la autoridad. Pero si su actitud no reviste la gravedad que exige el delito, Interior le puede castigar con una falta grave (1.000-30.000 euros) si causa “desórdenes graves o incendios”, tanto en la calle como en establecimientos, y sólo si su conducta representa “un peligro para las personas o bienes u ocasiona alteración de la seguridad ciudadana”.
¿Puedo acudir a una manifestación con capucha, casco o un gorro que me cubra la cara?
Si la policía considera que su conducta es pacífica, no incurrirá en infracción alguna y ni tan siquiera podrán obligarle a que descubra su rostro. Pero si participa en altercados de esa guisa, a una infracción grave se puede sumar otra de entre 1.001 y 30.000 euros por ir embozado.
"¡Cortamos la Gran Vía, y todos a Sol!"
Puede haber participado pacíficamente en una manifestación comunicada a la Delegación del Gobierno, pero si durante ella o a su término se sale del recorrido autorizado, cometerá una infracción leve, castigada con hasta 1.000 euros de multa.
¿Y si no obedezco las órdenes de los antidisturbios?
Estará cometiendo una infracción grave (1.000-30.000 euros), siempre que el policía considere que el desacato no tiene la entidad como para denunciarle por un delito de resistencia a la autoridad. Aquí se incluye la negativa a identificarse.
¿Puedo mostrarle mi DNI sin entregárselo?
A partir de que entre en vigor la reforma, no. La laguna en este aspecto se ha solucionado castigando con falta leve (hasta 1.000 euros) el negarse a entregar la documentación a los agentes. Estos se quejaban de que, si el requerido sólo se lo mostraba, no podían comprobar si se trataba de una falsificación.
¿Qué ocurre si insulto a un policía?
Lo mismo que si él considera que lo ha amenazado, coaccionado, injuriado o vejado. Podrá ser sancionado con una multa por infracción leve, de entre 100 y 1.000 euros. Como con el resto de las multas por infracción, podrá recurrir por la vía de lo contencioso-administrativo, cargada con las tasas judiciales por la reciente reforma del Gobierno.
¿Puedo colgar en Internet una carga policial?
Sí, siempre que el Ministerio del Interior no considere que atenta contra el derecho al honor del policía, a su intimidad o a la propia imagen, o que pueda poner en peligro una operación o la seguridad del agente o la de su familia. Si así ocurriera, hay prevista una multa por infracción leve (100-1.000 euros).
¿Puedo participar en una protesta ante la sede de un partido convocada en Twitter?
Será una infracción leve si no ha sido comunicada. En el caso de que la protesta tenga lugar durante la jornada de reflexión o votación y además se desarrolle con “una finalidad coactiva”, el castigo se endurece sensiblemente. Participar en ella puede costar entre 30.000 y 600.000 euros de multa, ya sea a las puertas de la sede de una formación política o en cualquier otro lugar.

Fuentes autorizadas de Interior consideran que las manifestaciones del 15M de 2011 en la Puerta del Sol no tenían intención “coactiva”, pero sí las que se produjeron el 13 de marzo de 2004 ante la sede nacional del PP para exigir la verdad sobre los atentados del 11M. Los convocantes tienen en estos supuestos los mismos castigos que los asistentes.
¿A cuánto sale parar un desahucio?
Como el resto de infracciones de la Ley de Seguridad, quedará a criterio de la policía. A partir de ahora, las Fuerzas de Seguridad estarán facultadas para imponer multas de entre 1.000 y 30.000 euros a aquellos que se propongan evitar el desahucio de las personas que habitan un inmueble.

Una de las infracciones graves del nuevo texto está destinada a los que protagonicen “actos de obstrucción” a la ejecución de una decisión judicial o administrativa a cargo de una autoridad o cargo público.
¿Puedo interrumpir el mitin de un partido al grito de "sí se puede"?
Puede, pero además de arriesgarse a la reacción de los militantes, las Fuerzas de Seguridad podrán sancionarle por “perturbación del orden en un acto de campaña electoral”. Resultado: entre 1.000 y 30.000 euros de multa.

Cabe destacar que revestirá la misma gravedad interrumpir un mitin que la votación, el escrutinio o el recuento de votos. Recuerde que también puede incurrir en un delito si sus actos encajan en los descritos en la Ley Electoral.
¿Saldrá gratis gritar contra España o la policía o escribirlo en Twitter?
 Estarán castigadas con multas de entre 1.000 y 30.000 euros las “ofensas o ultrajes” a España, las comunidades autónomas, entidades locales y sus instituciones, símbolos o himnos.

Los periodistas se han esforzado en que el ministro del Interior detalle qué conductas concretas harían incurrir en esta falta grave, pero él se ha escudado en que eso lo determinará la “casuística”.

Por el redactado del anteproyecto, todo indica que sea cual sea la manifestación, este tipo de gritos será sancionado con multas graves. Y atención a escribirlas en redes sociales: el articulado penaliza su difusión “por cualquier medio”. Si se producen dentro de los estadios, ya hay multas recogidas en la Ley del Deporte.
¿Puedo protestar ante una central nuclear contra ese tipo de energía?
Si la protesta ha sido comunicada a la Delegación del Gobierno y no ha sido prohibida, no podrá ser sancionado. De lo contrario, tan solo con participar, puede llevarse a casa una sanción de entre 1.000 y 30.000 euros por infracción grave.

Si además las Fuerzas de Seguridad consideran que su actuación ha provocado “riesgo para las personas o un perjuicio” en el funcionamiento de la central nuclear o cualquiera de las otras infraestructuras que la Ley 8/2011 considera “críticas”, habrá incurrido en una falta muy grave, castigada con multas de entre 30.000 y 600.000 euros.

Tan solo sobrevolar con una avioneta esa central u otra infraestructura crítica le puede costar a una organización ecologista hasta 30.000 euros.
¿Y si mi protesta consiste en descolgar un cartel del frontispicio del Congreso?
Pues entre 1.000 y 30.000 euros. Ya haya escalado el Congreso de los Diputados, el Museo del Prado o cualquier otra institución o edificio considerado de interés “histórico-artístico”.
¿Qué otras formas hay de cometer estas infracciones?
Si comete tres leves en un plazo de dos años, será castigado además como si hubiera incurrido en una grave. 
Y si incurre en tres graves en el mismo periodo, como si su infracción hubiera sido muy grave.

Este es el principal argumento del Ministerio del Interior para poner en marcha un registro de infracciones, una suerte de fichero policial de infractores, incluidos los desobedientes. 

Archivo del blog